Turquía aseguró ayer a sus aliados de la OTAN que no se produjo una incursión de sus tropas en Irak este fin de semana y les dio «nuevas garantías» de que no se está produciendo la ocupación del Kurdistán iraquí temida por EEUU, informaron fuentes aliadas.
El embajador de Turquía ante la OTAN, Ahmet Uzumcu, dio esas garantías a sus aliados en el Consejo del Atlántico Norte (CAN), que reúne a los representantes permanentes de los 19 países miembros de la Alianza, así como en el Comité de Planes de Defensa (CPD).
Uzumcu insistió en que «sus fuerzas no han entrado en Irak y que las autoridades de Ankara están preocupadas por una crisis humanitaria», sobre todo por un eventual flujo masivo de refugiados.
El embajador reiteró a sus colega de los países aliados la declaración del ministro de Exteriores turco, Abudlá Gul, al secretario general de la OTAN, George Robertson, asegurando que no planea desplegar sus tropas en el norte de Irak.
«Turquía está preocupada sólo por la seguridad de sus propias fronteras y por asegurar que está lista y es capaz de hacer frente a cualquier crisis humanitaria en esas fronteras», dijo Gul a Robertson el pasado sábado, según recalcó Uzumcu.
El objetivo era proseguir las consultas entre los aliados emprendidas después del comienzo de la ofensiva estadounidense-británica en Irak.También pasaron revista a las medidas «defensivas» adoptadas en febrero pasado a favor de Turquía, que incluyen el despliegue de aviones radar E-3A AWACS de la OTAN para garantizar la vigilancia del cielo turco ante una eventual agresión iraquí.
El jueves pasado, poco después del comienzo de las hostilidades en Irak, la OTAN reafirmó su solidaridad con Turquía, el único país de la Alianza que tiene frontera con el territorio de Irak.