EFE - AMAN
Los miles de refugiados iraquíes que se encuentran en la frontera
de su país con la de Jordania están pasando un auténtico calvario
para escapar de la pesadilla de la guerra y apenas unos pocos
logran, hasta el momento, cruzar la frontera. Los más afortunados
han sido aquellos de nacionalidad distinta a la iraquí, además de
otros pocos que han sbornado a los funcionarios fronterizos.
La situación para ambos sectores es angustiosa y ya se han detectado los primeros casos de infección pulmonar entre los refugiados que han logrado cruzar la frontera, debido a las bajas temperaturas nocturnas del desierto. Los enfermos son principalmente niños, que constituyen un 20 por ciento de las 436 personas, principalmente de nacionalidad sudanesa y chadí, que se cobijan en las tiendas de lona levantadas en medio del desierto a 52 kilómetros de la frontera con Irak.
Cuatro médicos del Creciente Rojo de Jordania atienden a los enfermos donde hasta el momento los más de 120 voluntarios, entre ellos tres extranjeros de origen británico, han conseguido levantar tan sólo 100 tiendas debido a las pésimas condiciones metereológicas. La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) firmaron ayer un acuerdo de cooperación para coordinar tareas humanitarias en Arabia Saudí, Irán, Jordania, Kuwait, Siria y Turquía, ante los grandes desplazamientos de población iraquí que se preven en la zona.
«Esta asociación será muy importante para las Sociedades Nacionales de la Media Luna Roja a la hora de colaborar con sus gobiernos en el esta crisis», comentó el secretario General de la Federación, Didier Cherpitel. Asimismo, aseguró que los mecanismos previstos «permitirán que todas las partes mejoren la asistencia que prestan a las poblaciones afectadas».
Este acuerdo, firmado en Ginebra por Cherpitel, y por el el Alto Comisionado de ACNUR, Ruud Lubbers, dotará a las organizaciones humanitarias «de mecanismos perfeccionados para intercambiar información, para coordinar la planificación en previsión de emergencias y para optimizar la utilización de recursos».