AGENCIAS-NACIONES UNIDAS
Irak entregó un centenar de documentos sobre la eliminación en 1991
de armas de destrucción masiva y el hallazgo de una bomba R-400,
informó ayer el jefe de los inspectores de la ONU, Hans Blix. Su
divulgación representa «elementos positivos», dijo Blix,
responsable de la Comisión para la Inspección, Verificación y
Control del desarme en Irak (UNMOVIC), aunque señaló a los
periodistas que se necesita estudiarlos con más detenimiento.
Anunció que había recibido información de Irak sobre el descubrimiento de una bomba R-400 que contenía líquido, en un área de Bagdad donde se había realizado en el pasado la destrucción de armas que contenían agentes químicos. Irak admitió en 1995 que había producido 155 bombas R-400 que contenían agentes biológicos, entre ellos esporas de ántrax (carbunco).
Asimismo, Blix anunció que Irak había entregado cien nuevos documentos relacionados con la destrucción, en 1991, de armas de destrucción masiva. «También hay otra carta en la que dice que han encontrado cientos de documentos que contienen el acta de destrucción de otros materiales prohibidos», indicó Blix. El Gobierno iraquí ha dado señales en días recientes de haber mejorado su cooperación con Naciones Unidas, según reconoció Blix al destacar que había aportado datos «nuevos y positivos». Las declaraciones de Blix podrían caer como un jarro de agua fría para Estados Unidos, Reino Unido y España, que buscan que los demás miembros del Consejo de Seguridad ratifiquen la propuesta de segunda resolución contra Irak para constatar que el régimen de Sadam Hussein no está cumpliendo con lo exigido por la ONU.El secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld, afirmó por su parte que Irak dispone de aviones no tripulados preparados para realizar ataques biológicos o químicos y que tienen una autonomía de vuelo de «cientos de kilómetros».