El primer ministro israelí, Ariel Sharon, ha declarado «irrelevante» el acuerdo de Hebrón que Israel firmó en 1997 y que concedía a la parte palestina de esa ciudad el régimen de autonomía según los parámetros del proceso de paz de Oslo. «Está claro que el Acuerdo de Hebrón está anulado, de todos modos no se cumple y (por lo tanto) no tiene ya ninguna relevancia», afirmó ayer Sharón ante los miembros de su Consejo de Ministros, en una reunión dedicada exclusivamente a la muerte, el viernes, de doce israelíes en esa ciudad cisjordana, tras una emboscada de milicianos palestinos.
El primer ministro respondía así a las demandas de varios miembros del gabinete de declarar oficialmente muerto dicho acuerdo, que Israel y la ANP alcanzaron con la mediación de Estados Unidos y que fue el último entre las partes dentro del proceso iniciado en Oslo en 1993. Los doce israelíes, nueve de ellos militares y tres colonos de una unidad armada de seguridad, murieron cuando tres milicianos de la Yihad Islámica les tendieron una emboscada en un sendero que conduce del asentamiento de Kiriat Arbá a la Cueva de los Patriarcas, conocido como el «camino de los feligreses».
Desde entonces, el Ejército israelí ha tomado toda la ciudad y ha declarado el toque de queda, mientras los soldados recorren sus calles en una redada casa por casa para arrestar activistas de la Intifada, hasta ahora casi medio centenar.
Igualmente ha demolido al menos nueve viviendas de palestinos, entre ellas varias de activistas islámicos y la del supuesto cerebro de la emboscada, Muhamad Sieder.
El ministro de Exteriores y candidato a dirigir el Likud, Benjamin Netanyahu, exigió por enésima vez la expulsión de Yaser Arafat, el presidente palestino. «Arafat no hace absolutamente nada para impedir el terrorismo, y además hace lo posible para que nadie trate de frenarlo», dijo el ministro de Exteriores en una reunión que celebró a primera hora de la tarde con diplomáticos extranjeros. Netanyahu pidió a la comunidad internacional que apoye las medidas que tome Israel «contra el terrorismo», después del ataque palestino del pasado viernes.
Anoche, unos 120 tanques y blindados israelíes penetraron por el sur de la ciudad de Gaza desde el cruce de Netzarim, acompañados de varios helicópteros de combate «Apache» y cazas F-17 que bombardearon la sede del cuartel general de la policía palestina.