La Casa Blanca se plantea las elecciones del próximo martes no sólo como una consulta de la que saldrá un nuevo Congreso, sino también como un referéndum en el que los votantes harán saber al Gobierno cuáles son sus prioridades. Los analistas coinciden en destacar que el 5 de noviembre, además de elegir a cientos de altos cargos tanto legislativos como ejecutivos, los votantes mostrarán su preferencia entre la política de seguridad nacional de George Bush o la preocupación por la economía que enarbolan los demócratas.
Bush plantea elecciones como un referéndum para su Gobierno