El ataque contra tropas estadounidenses en Kuwait, en el que murieron un infante de Marina y dos agresores, añade más tensión a la región del Golfo Pérsico, donde EE UU está incrementando su poderío militar en las cercanías de Irak. El Pentágono informó de que el incidente se registró durante un ejercicio multinacional en la isla de Failaka, a 40 kilómetros de Irak. Un portavoz del Pentágono, teniente coronel Dave Lapan, dijo que los atacantes fueron en una camioneta a un área urbana y deshabitada de la isla, donde un millar de soldados de la Infantería de Marina realizaban un ejercicio de combate casa por casa.
El portavoz del Pentágono dijo que los atacantes dispararon contra los soldados estadounidenses y murieron cuando éstos respondieron al fuego. Un soldado de la Infantería de Marina murió más tarde mientras era operado en el hospital militar estadounidense en Camp Doha. Otro soldado sufrió heridas. Lapan, dijo que a los soldados estadounidenses «les dispararon dos atacantes desconocidos, que aparentemente eran civiles».
Los efectivos de la 11 Unidad Expedicionaria de la Infantería de Marina, con base en Camp Pendleton (California), llegaron a la región a bordo de los buques anfibios de transporte «Denver» y Mount Vernon», cuyos 900 tripulantes también participan en los entrenamientos. El ejercicio forma parte de las maniobras anuales «Eager Mace», que se iniciaron el 1 de octubre y durarán dos semanas, e incluye ensayos de desplazamiento y abastecimiento en una zona desértica cercana a la frontera iraquí.