El jefe de los servicios secretos iraquíes, Taher Jalil Habbuch, confirmaron ayer que el terrorista palestino Abú Nidal se suicidó de un disparo en la boca cuando iba a ser interrogado por las autoridades tras detectar su presencia en el país. Fuentes del régimen de Bagdad aseguraron que Nidal, uno de los terroristas más buscados del mundo, se encontraba en arresto domiciliario por conspirar contra el Gobierno de Sadam Husein.
En rueda de prensa, Habbuch explicó que Nidal, de verdadero nombre Sabri al Banna, entró «ilegalmente» en territorio iraquí en 1999 procedente de Irán y con pasaporte yemení. Al ser detectada su presencia en Bagdad, miembros de los servicios de seguridad se desplazaron a su apartamento para detenerle con el fin de interrogarle. «Entonces entró en una de las habitaciones para cambiarse de ropa y se escuchó un disparo. Los miembros de los servicios de seguridad descubrieron que se había pegado un tiro en la boca y que la bala salió por la parte de atrás del cráneo», precisó el responsable iraquí. «Murió ocho horas después en el hospital», añadió.
El precio del crudo superó hoy los 30 dólares en el mercado de Nueva York, el nivel más alto en 15 meses, y los analistas consideran que podría seguir al alza ante la amenaza de un posible ataque contra Irak, entre otros factores. Por otra parte, al cierre, los contratos para entrega en septiembre del Petróleo Intermedio de Texas, el de referencia en EEUU, registraron un alza de 0'27 dólares y se situaron a 30'11 dólares por barril, después de alcanzar los 30'32 dólares durante el transcurso de la sesión.
Los contratos para septiembre de gasolina y gasóleo de calefacción subieron y quedaron a 0'80 dólares y 0'73 dólares por galón (3'7 litros), respectivamente. Una eventual ofensiva militar de EE UU para derrocar a Sadam Husein podría dar lugar a una interrupción de los suministros de crudo a Occidente desde Oriente Medio, en un momento en que las reservas almacenadas en EE UU están en el nivel más bajo.