El mismo día en que los bancos uruguayos reabren sus puertas tras cuatro jornadas de 'corralito', los principales sindicatos del país han amenazado con convocar una huelga general para hoy contra la política económica de Jorge Batlle. El paro estaría secundado por todos los sectores del país y su duraración sería desde el mediodía hasta la medianoche. La huelga incluye movilizaciones callejeras. Los bancos uruguayos reabrieron sus puertas tras casi una semana de inactividad en medio de largas colas y nerviosismo ante los bancos públicos y agitada actividad en la banca privada.
Decenas de personas hacían cola desde varias horas antes de la apertura, a las 13.00 hora local (16.00 GMT), a las puertas de la casa central y sucursales del estatal Banco de la República Oriental del Uruguay, el más importante del sistema financiero. Aún así, la aparente normalidad y el orden en las colas fueron la tónica dominante antes y en el momento de apertura, aunque en la Ciudad Vieja, centro financiero de la capital uruguaya, se notaba una mayor presencia por parte de las fuerzas del orden. También hubo colas junto a los cajeros automáticos y en algunos de ellos se agotaron las reservas de dinero.
Contra lo que se esperaba, en los momentos de apertura no se sintió la afluencia de clientes argentinos, ya que la mayor parte de los clientes de bancos uruguayos no residentes en el país son argentinos. La reapertura de los bancos uruguayos fue posible tras recibir esta mañana una ayuda de 1.500 millones de dólares de parte del Tesoro de los Estados Unidos. Se trata de un adelanto de una cifra similar aprobada por el FMI, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para que Uruguay haga frente a la que se considera la peor crisis financiera de la otrora llamada «Suiza de América». Gran parte de la ayuda internacional, 1.100 millones de dólares, están destinados a respaldar los depósitos en cuentas corrientes y cajas de ahorro.