Las autoridades militares y policiales de Colombia se encuentran en estado de máxima alerta ante el recrudecimiento de acciones terroristas, tres días antes de la investidura del presidente Alvaro Uribe Vélez. Los comandos de las Fuerzas Militares y de la policía declararon esta alerta tras el estallido el sábado de un vehículo cargado con explosivos en Bogotá, y en medio de operaciones en las cuales se han hallado toneladas de explosivos. La explosión del coche bomba, que provocó heridas a una mujer y destrozos en los alrededores, fue la confirmación de que los grupos terroristas están dispuestos a sabotear la llegada de Uribe a la presidencia.
El vehículo estaba cargado con al menos 20 kilos del compuesto llamado «súper-anfo» y pudo causar un desastre mayor si hubiese explotado toda la carga. El artefacto explosivo fue colocado en un automóvil robado que dos desconocidos abandonaron junto a un comando policial situado frente a una iglesia y muy cerca de la que fuera sede del presidente, Andrés Pastrana, durante su campaña para la jefatura del Estado.
«Explotó como un kilo y medio de anfo, pero dentro del vehículo se encontró otra cantidad que no explotó, por lo que creemos que se trataba de una segunda bomba de mayor poder que querían accionar cuando llegaran las autoridades», dijo el comandante policial de Bogotá, general Héctor Darío Castro.
La policía puso en funcionamiento esta semana en la capital colombiana un plan de seguridad, que incluye a más de 11.000 agentes, para mantener el orden de cara a la toma de posesión. Pero, lo cierto es que la violencia terrorista se ha desencadenado en los últimos días. Los hechos más grave ocurrían en Medellín, al noroeste de Bogotá, donde al menos ocho rebeldes, dos civiles y un suboficial del Ejército murieron, así como tres militares y dos policías resultaron heridos en operaciones contra las milicias urbanas en barrios populares del sur y occidente de la ciudad. Entre tanto, mediante una comunicación divulgada por la cadena «Caracol», las FARC desmintieron la existencia de una propuesta del presidente Pastrana para concretar un acuerdo humanitario que permita la liberación de los secuestrados.