«En respuesta al asesinato de cada dirigente de nuestro movimiento, nosotros mataremos al menos a 100 sionistas», amenazaron en un comunicado las Brigadas Ezzedin al Qasam, el brazo armado del movimiento radical islamista. Reivindicando el atentado de Jerusalén, que causó 7 muertos y 70 heridos, Hamas afirmó que se trató de su «primera respuesta» al ataque israelí del 22 de julio en Gaza, que costó la vida a su jefe militar, y a otros 14 palestinos, entre ellos 9 niños, al tiempo que prometieron «infligir una lección a Ariel Sharon y a Binyamin Ben Eliezer».
Este endurecimiento de la posición de Hamas llega cuando hace tan solo diez días los grupos palestinos armados estudiaban decretar una tregua. El gabinete de seguridad israelí adoptó el miércoles por unanimidad un plan para impedir los atentados suicida. Entre las medidas estudiadas figuran la expulsión de familiares de los kamikazes cisjordanos a la franja de Gaza, expropiaciones y demoliciones de casas. Israel aplicó el jueves una de las disposiciones de este plan destruyendo dos casas en Cisjordania, entre ellas la del autor del atentado suicida que hirió a siete personas el martes.
El presidente de EE UU, George W. Bush, se declaró ayer «furioso» por el atentado cometido por Hamás en la Universidad Hebrea de Jerusalén, que costó la vida a siete personas, entre ellas cinco estadounidenses. «Estoy tan enfadado como Israel está ahora mismo (...). Estoy furioso por el hecho de que se perdieron vidas inocentes. Sin embargo y a pesar de mi furia, pese a que estoy muy enojado, todavía creo que la paz es posible», dijo.
Bush compareció ante la prensa junto al rey Abdalá de Jordania, con quien se reunió para tratar de seguir avanzando en su «visión» para lograr la paz en Oriente Medio.n un plazo de tres años. De otra parte, las elecciones presidenciales y parlamentarias palestinas previstas para el próximo mes de enero podrían retrasarse si no cesa la ocupación israelí, afirmó el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yaser Arafat. Ayer, soldados israelíes mataron a una niña de 9 años, Ashma Ahmed, e hirieron a un hombre de 65 años en la ciudad de Jan Iunes, informaron anoche fuentes palestinas de esa localidad de la franja de Gaza.