Un dirigente de la Yihad Islámica, movimiento radical palestino, fue asesinado ayer por el ejército israelí, horas después que se reiniciaran contactos israelí-palestinos a alto nivel suspendidos desde hace más de dos meses.
Moammar Daraghme, de 30 años, fue asesinado en una emboscada en Yamun, poblado palestino cerca de Yenin, en Cisjordania, informó el movimiento. Daraghme fue herido mortalmente por una unidad especial del ejército israelí, cuando circulaba en un vehículo junto a otros militantes del Yihad que consiguieron escapar. El asesinato se produjo horas después de una reunión en Jerusalén del jefe de la diplomacia israelí, Shimon Peres, con el ministro palestino de Finanzas, Salam Fayad.
Por otra parte, los soldados israelís de servicio en los territorios palestinos han recibido orden de identificarse sólo por sus nombres, sin mencionar los apellidos, por temor a que puedan ser sometidos a juicio en el extranjero por crímenes de guerra. La orden obedece al, hecho de que investigadores palestinos hagan un seguimiento para denunciarlos ante el nuevo Tribunal Penal Internacional.
En otro orden, el Primer ministro israelí Ariel Sharon pidió a su ministro estudiar medidas económicas y militares para mejorar la situación de los palestinos en Cisjordania nuevamente ocupada por Israel desde junio.