Un atentado terrorista atribuido al Grupo Islámico Armado (GIA), coincidente con el 40 aniversario de la independencia argelina, causó ayer 35 muertos y 31 heridos al detonar un potente artefacto en un mercado de Larbaa, a veinte kilómetros al sur de Argel.
El mercado de verduras se hallaba lleno de público por ser día festivo cuando, a las 9.15 hora local (08.15 GMT) y en medio del bullicio, se produjo una gran explosión que hizo saltar por los aires a varios parroquianos y tenderetes.
El paquete bomba colocado en un montón de basura, no lejos de uno de los puestos, causó la peor matanza de civiles en lo que va de año, confirmando el aumento de los actos terroristas del GIA a partir del nombramiento de su nuevo cabecilla nacional, Rachid Abu Turab, el 11 de febrero pasado.
Testigos de la explosión relataron las escenas desgarradoras que se observaron en el mercado, con varias personas ensangrentadas en el suelo, mientras otras gemían y pedían auxilio. «Ha sido uno de los atentados más grandes ocurridos en esta ciudad, donde en los últimos meses pensábamos que había desaparecido el peligro terrorista. Pero ahora vemos que volvemos a los peores tiempos de la crisis», dijo Suad, una de las clientes del mercado. Hace unos días, el GIA había repartido en Larbaa y otras localidades cercanas un comunicado atribuido a Abu Turab en el que se afirmaba que «la sangre y la destrucción será nuestra divisa contra el poder impío».