El Consejo de Seguridad aprobó ayer por unanimidad una resolución en la que se extiende el mandato de la misión de la ONU en Bosnia hasta el 15 de julio.
La resolución fue respaldada después de que no se lograse un
acuerdo entre EEUU y los otros 14 miembros del Consejo de
Seguridad.
EEUU presentó una propuesta para intentar salvar la misión en
Bosnia, la cual no fue bien recibida por algunos de los miembros
del Consejo de Seguridad.
En el proyecto, EEUU pide un aplazamiento de doce meses antes de que el Tribunal Penal Internacional (TPI) inicie investigaciones para procesar a miembros de tropas de paz de países no ratificantes del Estatuto de Roma, como es el caso estadounidense.
Esta disposición permitiría que ese período de doce meses se
renovara cada año.
«Aunque no se mencione la palabra 'inmunidad', la propuesta de EEUU
significa una inmunidad permanente para los miembros de las fuerzas
pacificadoras de los países que no forman parte del Tratado de
Roma», manifestó Richard Dicker, representante de la organización
Human Rights Watch.
Asimismo, el plan estadounidense permitiría a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad (EEUU, China, Rusia, Francia y Gran Bretaña) vetar las investigaciones sobre las fuerzas de paz por parte del TPI.
«Esto significa una transferencia del poder del TPI al Consejo de Seguridad», añadió Dicker, quien señaló que la aprobación de la resolución muestra cierta flexibilidad por parte de EEUU. La propuesta se enfrenta con la oposición de otros miembros del Consejo, entre ellos Gran Bretaña y Francia, que consideran que socava el espíritu y las disposiciones del TPI.