La cooperación internacional contra el terrorismo y la crisis en Oriente Próximo marcarán la agenda de la Cumbre en la que también se analizarán varios documentos sobre transporte, reducción de armas y asuntos como la ayuda para el desarrollo en Africa. No obstante, el principal foco de atención de los jefes de Estado y de Gobierno será el estado de los mercados internacionales y la fuerte caída de las bolsas europeas arrastradas por Wall Street, que no estaba previsto fuera analizado.
El presidente del Gobierno español, José María Aznar, tuvo ayer ocasión de intercambiar puntos de vista sobre el contenido de la Cumbre que se celebra en Canadá con el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi; el primer ministro británico, Tony Blair, y el canciller alemán, Gerhard Schroeder. Anoche se reunió con el presidente Bush, a quien pidió que se tratara la situación en Argentina.
La reunión de los jefes de Estado y de Gobierno de los siete países más poderosos (EE UU, Alemania, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) y Rusia se celebra en Kananaskis (Alberta), localidad situada a una hora de Calgary, donde se encuentra la prensa y van llegando desde hace días los miles de manifestantes antiglobalización.
Tras un almuerzo los mandatarios comenzarán la sesión de conclusiones sobre «Terrorismo Internacional» y más tarde la sesión de trabajo del G8. Además de los temas mencionados, la fuerte caída de Wall Street y el arraste de las bolsas europeas será sin duda un tema a abordar por todos ellos, que analizarán la situación económica mundial y el panorama tras los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos.