Después de que se mantuviera relativamente tranquila durante las últimas tres semanas en que tenía lugar la operación 'Muro Defensivo, la Franja de Gaza volvió a convertirse en escenario de los enfrentamientos, que podrían ser prólogo de una ulterior ofensiva. Dos militantes de la Yihad Islámica disfrazados con uniformes militares israelíes fallecieron al ser descubiertos y abatidos mientras intentaban infiltarse en el asentamiento de Netzarim. Un tercer activista murió al detonar un artefacto dentro del vehículo que conducía al acercarse a uno de los controles militares que rodean el perímetro del bloque de asentamientos de Gush Katif.
Ambos atentados fallidos desencadenaron sendas operaciones militares en el enclave de Al Karara, adyacente a Netzarim, y en los alrededores de Gush Katif, que se saldaban con cinco muertos más, dos de ellos civiles. Previamente, una incursión contra la localidad fronteriza de Rafá dejó otros tres muertos "dos militantes y un civil" y al menos seis heridos. El más de un millón de habitantes de la Franja de Gaza, el territorio con mayor densidad de población del mundo, temen que una vez concluya la ofensiva militar en Cisjordania, pudieran convertirse en objetivo de una eventual segunda fase de la «campaña contra la infraestructura terrorista» diseñada por el gabinete de seguridad israelí y el alto estado mayor del Ejército.
A pesar de que el Ejército israelí haya comenzado su retirada progresiva de Cisjordania, el toque de queda impuesto en Ramala y Belén, y el estado de sitio impuesto sobre Jenín y Naplusa volvieron a ser motivo de trágicos incidentes. Un niño de nueve años fue alcanzado por un disparo en el abdomen cuando caminaba por las calles de la localidad de Betunia, y un joven de quince recibió un impacto en pleno cráneo en el centro de Ramala. Ambos fueron abatidos por francotiradores militares por violar el toque de queda que fue impuesto hace ya tres semanas.
Mientras, numerosos países, entre ellos la UE, pidieron durante un debate abierto del Consejo de Seguridad que el primer ministro de Israel, Ariel Sharon, «deje de matar», mientras ese órgano estudia el envío de una fuerza internacional a Oriente Medio. Estados Unidos advirtió ante Consejo de Seguridad que vetará cualquier proyecto de resolución que pida una investigación sobre los «hechos trágicos» ocurridos en el campo de refugiados palestino de Jenín (Cisjordania).
Fallece un bebé palestino de cuatro días en Naplusa al
retener el Ejército israeí la ambulancia durante una hora y
media
Una niña de cuatro días murió ayer en la
ciudad cisjordana de Naplusa, al retener el Ejército de Israel
durante hora y media una ambulancia, informó el doctor Mustafá
Barguti, director de la organización humanitaria «Monitor
Palestino». «La niña murió en mis brazos», dijo en conversación
telefónica Sirhin, madre de la bebé, de 24 años y esposa de Naser
Sithi, colaborador gráfico de la agencia estadounidense Associated
Press, (AP). Según Sirhin, la niña tenía dificultades para respirar
y «llamamos varias veces a una ambulancia, que nunca llegaba». La
ambulancia estuvo retenida hora y media en un puesto de control
militar y «cuando finalmente llegó no nos dejaron salir hasta
después de otra hora», refirió la madre de la bebé. Dunia, que así
se llamaba la recién nacida, «murió en mis brazos y no llegó con
vida al hospital».