El ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic logró ayer que se reduzca el tiempo que durará su juicio en La Haya, donde habrá recibido con satisfacción el informe oficial holandés que lo exculpa de la masacre de Srebrenica. El juez Richard May dio a la Fiscalía del Tribunal para la ex Yugoslavia (TPIY) sólo un año más para presentar su caso contra Milosevic, acusado de crímenes contra la Humanidad en Kosovo y Croacia y de genocidio en Bosnia, particularmente por la matanza de 7.000 varones musulmanes de Srebrenica.
Mientras el proceso contra el ex presidente de Serbia y Yugoslavia continuaba en La Haya, en la capital holandesa se presentaba un esperado informe que el Gobierno encargó al Instituto holandés para la Documentación de Guerra (NIOD). Tras seis años de trabajo, el NIOD concluyó que la culpa de la matanza de Srebrenica recae sobre el entonces comandante serbobosnio, Ratko Mladic, pero repartió también la responsabilidad entre holandeses, la ONU y los propios musulmanes que protegían el enclave y «provocaban» a los sitiadores serbios.
No encontró, sin embargo, pruebas que «sugieran que las autoridades serbias en Belgrado estuvieran involucradas», en una conclusión que Milosevic podría presentar como prueba a su favor. Al comenzar el proceso, en febrero pasado, el ex presidente aseguró que se había enterado de lo ocurrido en Srebrenica por un enviado de la UE en Bosnia.