«Una de nuestras prioridades es conservar las relaciones con nuestros amigos, especialmente con Estados Unidos, pero es verdad que puede haber desacuerdos. Sin embargo, si estos desacuerdos se producen, serán desacuerdos entre amigos», afirmó Sharon. Sharon rechazó totalmente el llamamiento de Bush y ordenó al Ejército israelí que continúe sus operaciones en las localidades palestinas de Cisjordania. El Gobierno de Israel tiene intención de proseguir con la «batalla decisiva contra el terrorismo» palestino, como la definió ayer Sharon, a pesar de haber sido conminado por Bush a que ordene «el repliegue sin dilaciones» de sus tropas de Cisjordania.
En los nueve días que dura la «Operación muro de defensa», murieron 200 palestinos, 1.500 resultaron heridos y 1.300 fueron detenidos. Entre estos últimos fueron apresados 70 «terroristas buscados», informó al Consejo el jefe de las Fuerzas Armadas, Shaúl Mofaz.
Asimismo, perdieron la vida en lucha con la resistencia palestina once soldados israelíes, cuatro de ellos de entre los 20.000 reservistas movilizados para la principal ofensiva de Israel en Cisjordania desde la guerra de 1967, cuando ocupó militarmente esa zona. Otros 143 soldados israelíes fueron heridos en lucha con la resistencia palestina, informó el ministro de Defensa Benjamín Ben Eliezer. Ben Eliezer aseguró a sus colegas que, a pesar de que lo exigido anoche por Bush a Sharon «acortó el tiempo en el reloj de arena», la ofensiva no se interrumpirá antes de alcanzar sus objetivos, o sea «erradicar el terrorismo» a fin de «no tener que volver» a los territorios palestinos.
Con todo, Israel no podrá desoir la exigencia de EE UU, su principal aliado, que también -se supone- será la del secretario de Estado Colin Powell, quien emprendió ayer una gira y tiene previsto llegar hacia finales de semana a este país. La decisión de «desobedecer» a Washington coincide con el casi seguro ingreso del Partido Nacional Religioso (Mafdal), del sector ultranacionalista, a la coalición de unidad nacional de Sharon, quien por este motivo podría perder a sus asociados del laborismo. El primer ministro israelí dirigirá hoy un mensaje en al Parlamento (Kneset) y se prevé que anunciará la incorporación del Mafdal, que cuenta con 5 de los 120 escaños en esa Cámara.