A pesar de su ínfima calidad -no pasa de ser un vídeo casero- esta grabación representa, en opinión del Gobierno norteamericano, la absoluta confirmación de lo que ya se sabía: que Osama Bin Laden es el cerebro y el hombre que está detrás de la macabra trama terrorista contra «los infieles» de Estados Unidos. En opinión del secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, «no hay ninguna duda de que Bin Laden es el responsable de los ataques del 11 de septiembre», aunque ayer fue especialmente cuidadoso al referirse a la veracidad del documento visual que el Pentágono afirma haber encontrado en una vivienda de Jalalabad hace dos semanas.
El vídeo, que se supone grabado aproximadamente un mes después de los atentados, muestra a un Bin Laden muy relajado y mucho más comunicativo de lo habitual, compartiendo con otros amigos y con un jeque no identificado, los pormenores de la operación terrorista. El jeque da la sensación de que ha acudido desde otro lugar a la supuesta casa de huéspedes de Kandahar donde tiene lugar la reunión. El recibimiento y la despedida de los participantes en la reunión -que aparentemente toman agua, llevan turbantes y se sientan en colchonetas colocadas en el suelo de una habitación, por lo demás, desnuda- es de lo más efusiva y, dentro de la tradición árabe, se saludan con varios besos.
En esta conversación, traducida por un grupo de destacados arabistas de EE UU a petición del Gobierno, Bin Laden reconoce que infravaloró el impacto que los atentados contra las Torres Gemelas iban a tener en EE UU. Bin Laden indica que él y su grupo calcularon con antelación el número de víctimas que iban a causar «en función de la posición de la torre. Calculamos que los pisos que resultarían alcanzados serían entre tres y cuatro. Ese era la previsión más optimista».
Añade que pensó que «el fuego procedente del avión podría fundir la estructura de hierro del edificio y derrumbar el área donde se recibió el impacto y los pisos superiores únicamente. Eso era todo lo que yo esperaba». Pero evidentemente el impacto fue mucho mayor y esa realidad fue muy celebrada con risas por el propio Bin Laden y por sus correligionarios a quienes él llama «hermanos».
No lo sabían
Asegura también que sabía desde el jueves anterior que el
acontecimiento iba a tener lugar ese martes y recuerda cómo escuchó
las noticias procedentes de Estados Unidos en una emisora de radio.
Entre las informaciones interesantes que el vídeo aporta está el
hecho de que los 19 protagonistas que se auto inmolaron el 11 de
septiembre en los aviones secuestrado y posteriormente estrellados
en el World Trade Center y el Pentágono, no sabían lo que iba a
ocurrir.
Asegura que el jefe de toda la operación era Mohamed Atta, que él dice que era de la «Familia Egipcia», en referencia a la facción egipcia de Al Qaeda. Igualmente subraya que «los hermanos que llevaron a cabo la operación sabían que era una operación suicida y les pedimos a cada uno de ellos que se fueran a América. Pero no sabían nada de la operación. No tenían ni siquiera una carta. Pero fueron entrenados» y supieron lo que iba a pasar «justo el momento antes de que abordaran el avión».
Denuncias de que el vídeo está manipulado por la Casa
Blanca
El director del centro integrista islámico londinense «Al Maqrizy»,
Hany Al Sobai, afirmó que el vídeo sobre Osama bin Laden, que según
Washington prueba su implicación en los atentados del 11-S, «está
amañado». Al Sobai, de origen egipcio, aseguró que el vídeo «no
puede ser utilizado como prueba en un proceso judicial, porque ha
sido montado. El lugar es dudoso y los rostros y voces de Bin
Laden, sus hijos y (su lugarteniente y dirigente de la Yihad
egipcia) Ayman el Zawahri no se corresponden con la realidad».