Apenas veinticuatro horas después de felicitarse por el desarme del IRA, el Gobierno británico ha activado un plan para desmilitarizar el Ulster que empezó ayer mismo con la demolición de varias instalaciones militares. El ministro para Irlanda del Norte, John Reid, informó a la Cámara de los Comunes de que hoy se habrán tomado las primeras medidas para reducir la presencia militar del Ejército británico en Irlanda del Norte. Reid empezó por decir que el gesto del IRA «lleva el proceso de paz a un nuevo nivel político» y que las instituciones de la provincia norirlandesa "entre ellas el Gobierno y la Asamblea legislativa" «deben ser restablecidas lo antes posible».
Como decisión inmediata, declaró que ayer empezaron a ser demolidas dos torres de observación en el condado de Armagh, y hoy se hará lo propio con unas instalaciones militares en Newtonhamilton y en Magherafelt. El Gobierno británico "prometió" seguirá reduciendo sus efectivos militares en la provincia «en la medida en que mejore la situación con respecto a la seguridad». Se trata de que «la provincia vuelva a tener cuanto antes unas medidas normales de seguridad».
Londres también se ocupará de reformar la Policía norirlandesa siguiendo las recomendaciones recogidas en el «Informe Patten» (1999), documento que elaboró una comisión independiente presidida por el hoy comisario de Exteriores de la UE, Chris Patten. El Gobierno británico ha decidido renunciar a pedir la extradición o a encarcelar a los miembros de las organizaciones terroristas que han abrazado el proceso de paz y que tuvieran causas pendientes con la Justicia anteriores al 10 de abril de 1998, fecha en la que se firmó el ya famoso acuerdo de paz de Viernes Santo.
El PNV apela a Gobierno, Batasuna y ETA para que sigan
el ejemplo del IRA
El anuncio de desarme ha provocado diferentes reacciones en España.
Desde el ámbito nacionalista se apela al Gobierno y a Batasuna y
ETA para que sigan el ejemplo. Ajuria Enea ha querido vincular el
proceso de paz en Irlanda con el conflicto vasco. Por ello, su
portavoz, Josu Jon Imaz, pidió a Batasuna el «coraje político» de
Gerry Adams y el Sinn Fein, «capaces de ser actores políticos».
Imaz criticó a ETA, que ya se ha quedado sin «referencias
exteriores», pero también a Aznar, que «ha estado negando la
posibilidad de cualquier paralelismo entre Euskadi e Irlanda».
Mucho más pesimista, el portavoz parlamentario del PNV, Iñaki
Anasagasti, lamentó que no haya voluntad por parte de los
diferentes sectores para impulsar un proceso de paz similar. Sobre
este punto, el portavoz del PNV, Joseba Egibar, hizo una
puntualización. «No se puede obviar», dijo, que en el proceso
irlandés el Gobierno británico «proclamó el derecho de
autodeterminación», como pide el nacionalismo vasco.