EL Banco Central Europeo (BCE) recortó ayer medio punto los tipos de interés en la eurozona hasta el 3'75 por ciento en coordinación con la Reserva Federal de EE UU, que también bajó el precio del dinero en la misma cantidad hasta el 3 por ciento. Tras una reunión urgente del Consejo de Gobierno de la entidad por teleconferencia, el BCE difundió un comunicado justificando la bajada de tasas en «los recientes acontecimientos en EE UU, que podrían afectar negativamente a la confianza en la zona euro, reduciendo las expectativas de crecimiento a corto plazo».
Ante esta decisión sin precedentes de los bancos centrales de EE UU y la UE, los analistas consultados han coincidido en señalar que la medida conjunta es un ejemplo de «responsabilidad» que tiene como único objetivo evitar una situación de recesión mundial. Un portavoz del servicio de estudios del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) señaló que la acción coordinada del BCE y de la Reserva Federal tiene el objetivo principal de restaurar la confianza de los consumidores, tras los atentados que se produjeron el pasado martes en Nueva York y Washington.
De esta manera, los bancos centrales están intentando evitar, con la relajación monetaria decidida ayer que Estados Unidos entre en recesión, tal y como se baraja en algunos escenarios, ya que un repentino parón en el consumo podría hacer que la economía entrara en un crecimiento negativo. El banco emisor señala que «la incertidumbre de la economía mundial y estadounidense ha aumentado», que la Reserva Federal ha reaccionado con un recorte de los tipos interbancarios y que el BCE también ha decidido bajar los tipos. El BCE señala que unas perspectivas menores de crecimiento en la zona euro, a raíz de la pérdida de confianza por los ataques terroristas cometidos en EE UU, podría disminuir las tensiones inflacionistas en el área, «por lo que resulta apropiada una bajada de las tasas».
Añade que mantiene su confianza en «la fuerza básica y la resistencia» del sistema económico estadounidense y afirma que dados los «sólidos fundamentos de la zona euro», está seguro de que la reducción en el crecimiento económico será superada en poco tiempo. Tras la sorpresiva bajada de tipos en la eurozona y la caída de la bolsa de Wall Street en su primer día de apertura después de los atentados terroristas de Nueva York y Washington, el euro descendía ayer ligeramente frente al dólar.
Por su parte, las Cámaras de Comercio aseguraron que las bajadas de tipos de interés llevadas a cabo de forma coordinada por la Reserva Federal norteamericana (Fed) y el Banco Central Europeo (BCE) junto con el aumento de liquidez de los últimos días son «las medidas más acertadas» para conseguir el normal funcionamiento de los mercados, relanzar la confianza de los consumidores y permitir un acceso más fácil a la financiación de las empresas y los hogares, a la vez que podrían provocar una reacción alcista del euro. Las Cámaras explicaron en un comunicado que las bajadas de tipos confirman la resolución de los países desarrollados para que el ataque a Estados Unidos tenga los mínimos efectos sobre la economía real.