Tras determinar que los piratas aéreos fueron dieciocho, el FBI sigue miles y miles de pistas para descubrir a los terroristas. Los secuestradores eran pasajeros de los aviones, dijo ayer el director de la Oficina Federal de Investigación (FBI), Robert Mueller, durante una conferencia de prensa conjunta con el fiscal general (ministro de Justicia), John Ashcroft, quien subrayó que el FBI trabaja sobre «miles y miles de pistas» que le han llegado por teléfono y vía internet. Ashcroft dijo que en los aviones que se estrellaron contra las Torres Gemelas había sendos grupos de cinco secuestradores y en cada uno de los otros dos aparatos "el que destruyó un ala del Pentágono y el que cayó en Pensilvania" cuatro terroristas. Cinco de los supuestos responsables de los atentados permanecieron casi un año en el estado de Florida aprendiendo a pilotar aviones.
Los nombres de los sospechosos estaban incluidos en la lista de pasajeros de los aviones secuestrados y utilizados en los atentados contra Nueva York y Washington. Mohamed Atta, de 33 años, residía en Coral Springs, al norte de Miami, y estaba en la lista de pasajeros de un avión secuestrado en Boston y usado en el atentado contra las Torres Gemelas. Marwan Alshehhi, de Hollywood, es otro de los sospechosos y las autoridades hallaron un vehículo en el aeropuerto de Boston registrado a nombre de esta persona y de Atta. Waleed Al Shehri, de 25 años, un hombre de Daytona Beach que en una ocasión tuvo una licencia de piloto comercial; Abdulatif A Al-Omari, de 31 años y Wail M. Al Shehri, de 28 años, de Boynton Beach.
Atta llegó a Broward a principios del año pasado y se mudó en julio a Florida para tomar clases de aviación. Los investigadores del FBI consideran que los secuestradores podrían no conocerse unos a otros previamente y habrían actuado tras recibir una señal, asumiendo cada uno el papel que les habían designado previamente, según informa la cadena CNN, citando fuentes policiales. Según publicaba ayer el diario árabe 'Asharq al Awsat', editado en Londres, Los talibán, en el poder en Kabul, entrenaron hace un año a catorce «fanáticos musulmanes» a pilotar aviones de línea, principalmente aparatos de tipo Boeing 727. El fiscal general de EE UU aseguró que los secuestradores tuvieron un «significativo» apoyo en tierra y explicó que las autoridades estadounidenses han interrogado a muchas personas.
Ashcroft explicó que, en la página de internet que fue inmediatamente habilitada tras la tragedia, se han recibido más de 22.700 pistas, además de 2.055 llamadas telefónicas, algunas de las cuales han sido «válidas» para la investigación. De todo ese volumen informativo, «algunas de las pistas nos han sido útiles», reconoció. La portavoz de ese ministerio, Mindy Tucker, dijo que se habían realizado algunas detenciones, pero no informó del número de detenidos ni de los lugares en que se practicaron. La policía y la Oficina Federal de Investigación (FBI) sellaron ayer Staten Island, una de las islas de Nueva York, donde al parecer buscan a un sospechoso de los ataques terroristas. El miércoles, los agentes del FBI detuvieron un tren en el Estado de Rhode Island en busca de personas que estuvieran relacionadas con el ataque terrorista e interrogaron a varios posibles testigos en Boston.