El Concorde podrá reanudar sus vuelos, interrumpidos desde el siniestro de julio de 2000, gracias al restablecimiento condicional de su certificado de navegabilidad por las autoridades de aviación civil de Francia y del Reino Unido. Estas autoridades han decidido «levantar la suspensión de los certificados de navegabilidad» del Concorde con la condición de que los aparatos «sean modificados en conformidad con las consignas de navegabilidad que han emitido».
El permiso de vuelo del Concorde había sido suspendido a mediados de agosto de 2000, tres semanas después de que uno de los aparatos de Air France se estrellara cerca de París tras despegar en llamas del aeropuerto de Roissy-Charles de Gaulle con rumbo a Nueva York, causando la muerte de 113 personas. «Se podrán reanudar los vuelos comerciales en cuanto hayan modificado sus aparatos y entrenado de nuevo a su personal», precisó el Ministerio francés de Transporte.
Las modificaciones aprobadas por las autoridades para reforzar la seguridad del «pájaro blanco» se refieren a los neumáticos del tren de aterrizaje, el revestimiento interno de los depósitos de queroseno, el cableado eléctrico de ciertos elementos del avión y la revisión de varios procedimientos. British Airways (BA), propietaria de siete aparatos, ha anunciado que retomará los vuelos entre Londres y Nueva York «en algún momento de el mes de octubre», según el jefe de pilotos de Concorde de BA, Mike Bannister.