Una explosión en las oficinas de Al Fatá en Hebrón, causó ayer noche la muerte de un activista palestino perteneciente a Tanzim, brazo armado juvenil de Al Fatá y heridas a otros tres palestinos. Fuentes palestinas señalaron que las oficinas del partido del presidente Yasir Arafat, fueron alcanzadas por dos misiles antitanques disparados por fuerzas israelíes.
Por otra parte el ministro israelí de Defensa, Benjamín Ben Eliezer, condenó ayer el asesinato de tres civiles palestinos por presuntos extremistas israelíes y advirtió de que este ataque reabre el debate sobre el despliegue de una fuerza internacional en los territorios palestinos. «Este asesinato criminal acelerará el proceso para el envío a la región de una fuerza internacional de observadores», declaró Ben Eliezer.
Miles de palestinos clamaron ayer venganza por el asesinato de tres civiles por extremistas judíos, uno de ellos de sólo tres meses, cerca de la ciudad de Hebrón, mientras que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) pide el envío de observadores internacionales para proteger a su población de Israel.