El juicio contra cuatro ruandeses, dos de ellos monjas benedictinas, por presunta participación en el genocidio cometido en Ruanda entre el 6 de abril y el 18 de julio de 1994 comenzó ayer en la gran sala del Tribunal penal de Bruselas.
Los cuatro acusados, que residen actualmente en Bélgica, son el profesor Vincent Ntezimana, el político Alphonse Higaniro, y las religiosas católicas Consolata Mukangango (sor Gertrudis) y Julienne Mukabutera (sor María Kisito).
Dentro del juicio, los dos abogados defensores del político ruandés Alphonse Higaniro cuestionaron la competencia del Tribunal penal de Bruselas para juzgar a su cliente.
Más de 200 periodistas están acreditados para seguir este juicio excepcional en el que un jurado popular juzgará los hechos presuntamente cometidos.