El Congreso de Estados Unidos certificó ayer oficialmente al republicano George W. Bush como presidente electo, después de contabilizar los votos electorales de los 50 estados de la unión. La proclamación oficial la hizo Al Gore, en su calidad de presidente del Senado, después de que los congresistas del «caucus» negro objetaran sin éxito el recuento de votos de Florida y abandonaran la sesión conjunta de las dos cámaras del Congreso.
Para que una de las 20 objeciones presentadas por el «caucus» negro de la Cámara de Representantes hubiera sido tomada en cuenta debía estar, no sólo presentada por escrito, que todas lo estuvieron, sino también firmada por algún senador. Ninguno de los 100 senadores de Estados Unidos se avino a firmar. Gore afirmó que George W. Bush y su candidato a vicepresidente habían obtenido 271 votos electorales, mientras que su candidatura y la del senador Joe Lieberman, obtuvieron 266.
La certificación por parte del Congreso es el último paso previo a la investidura de George W. Bush como 43 presidente de Estados Unidos, que tendrá lugar el próximo día 20 de enero.
Al Gore es el primer vicepresidente de Estados Unidos desde Richard Nixon en 1960 que, habiendo buscado la reelección, ha tenido que proclamar, en su calidad de presidente del Senado, ganador de la contienda al que fuera su duro rival electoral.