La defensa de Augusto Pinochet confirmó ayer su negativa a que el ex dictador se someta a los exámenes médicos y al interrogatorio ordenados por los tribunales, si el juez Juan Guzmán no accede a cambiar las fechas de los mismos. El magistrado decretó el martes que dichos análisis mentales y neurológicos se realicen el próximo 7 y 8 de enero, mientras que la declaración indagatoria quedó fijada para el día 9 de este mes.
Guzmán cumplió así con lo que le exigió la Corte Suprema al resolver que debía tomar las pericias de salud en un plazo de 20 días, contados desde el 20 de diciembre, pero la defensa consideró «un agravio» que no se esperara a los resultados médicos para proceder al interrogatorio. En este contexto, la defensa, que ha intensificado su ofensiva judicial para tratar de evitar que el general sea enjuiciado, presentó ayer ante Guzmán un recurso de reposición. El recurso fue presentado por el abogado Gustavo Collao y en él se solicita que se reconsidere la fecha de la realización de la evaluación médica y la de la declaración indagatoria.
Horas antes de que éste recurso se concretara, el juez había señalado que aplicará la ley si el desaforado senador decide no presentarse al peritaje médico y al interrogatorio. El presidente Ricardo Lagos, en tanto, señaló que serán los tribunales los que resolverán sobre los requerimientos de la defensa de Pinochet. «Lo que tengo entendido que están haciendo es introducir recursos para que, si son aceptados, permitan al senador no presentarse, pero ese es un tema que está en manos de los tribunales», dijo Lagos. Agregó que la tramitación de estos recursos «forma parte del funcionamiento de la institucionalidad del país».
El abogado José María Eyzaguirre, que integra el equipo jurídico que defiende a Augusto Pinochet, ratificó ayer que el ex jefe militar y su familia acogieron la recomendación de la defensa de que no se someta a los exámenes médicos ni al interrogatorio.