Cuatro palestinos y un soldado israelí murieron en los enfrentamientos registrados ayer en los territorios de la Autonomía Palestina, en una de las jornadas más violentas de esta semana, en la que hay que sumar la muerte de otro palestino, herido el viernes. En los choques de ayer resultaron heridos 120 manifestantes palestinos, una periodista estadounidense de la agencia de noticias AP y seis israelíes.
En Cisjordania, los principales brotes de violencia se dieron en las ciudades de Hebrón, Belén y Jenín, localidad esta última en la que hoy murió uno de los palestinos heridos el viernes. La periodista ruso-estadounidense Yola Monakov, de 26 años de edad, fue herida por una bala de acero recubierta de caucho mientras fotografiaba un enfrentamiento cerca de la tumba de la matriarca Raquel, en Belén. En Hebrón, un adolescente de 16 años murió por disparos de soldados israelíes en la violenta ola de disturbios que sacudió esa ciudad cisjordana.
Sin embargo, los enfrentamientos más violentos tuvieron lugar en la franja de Gaza, donde ayer se encontraba de visita la Alta Comisaria de Derechos Humanos de la ONU, Mary Robinson. Un joven palestino del campo de refugiados de Jebalia murió por disparos de soldados israelíes en los disturbios que se registraron cerca del paso fronterizo de Erez, en el norte de la Franja de Gaza. Asimismo, dos palestinos murieron en un prolongado tiroteo con una patrulla militar cerca del asentamiento judío de Gush Katif, en el que murió además un soldado israelí de 28 años y otro resultó herido leve.
Mientras, el primer ministro Ehud Barak, partió anoche hacia EE UU para entrevistarse hoy con el presidente de ese país, Bill Clinton, en lo que parece un último intento de la Administración estadounidense para detener la violencia y restituir el orden en Cisjordania y Gaza. La ambigua situación política en Estados Unidos, donde aún se desconoce quién es el vencedor de las elecciones presidenciales del martes, no parece ayudar a que el conflicto entre palestinos e israelíes se encarrile en la vía del diálogo. Barak se mostró pesimista sobre los resultados de su viaje.