El centro de Belgrado fue tomado anoche por una multitud como nunca se había visto en manifestaciones políticas, llegada a oír a su candidato presidencial, Vojislav Kostunica, que ha derrotado, según datos todavía no oficiales, al presidente Slobodan Milosevic.
«!Queridos compatriotas liberados, hemos vencido a pesar de las mentiras y la violencia de Slobodan Milosevic, a pesar de las sanciones económicas y las bombas de la OTAN!», exclamó Kostunica ante unas 200.000 personas, con fuegos artificiales y tras los sones del himno monárquico serbio «Dios de Justicia». Kostunica garantizó que Yugoslavia cuenta con el apoyo de la Unión Europea, pero insistió en que «lo decisivo es nuestra decisión de pararle los pies al capricho de un hombre», en referencia a Milosevic.
«El Ejército y la Policía están ahí para defendernos, son parte de nuestro pueblo», dijo Kostunica, y advirtió de que los uniformados no pueden ser los pretorianos de una familia, en clara referencia a Milosevic y su politizada esposa, Mirjana Markovic. Precisamente el jefe del Estado mayor, el general Nebojsa Pavkovic, declaró ayer que el Ejército yugoslavo no intervendrá en caso de disturbios y aseguró que Milosevic respetará cualquier resultado de las elecciones. «Es el Ministerio del Interior el encargado del restablecimiento de la paz (en caso de disturbios); el Ejército no tiene nada que hacer en esos casos, tiene otros deberes», dijo Pavkovic en declaraciones divulgadas por la agencia independiente serbia Beta.
La Comisión Electoral dice que Kostunica obtuvo el 48'2 por ciento de los votos, por lo que hará falta una segunda ronda entre él y Milosevic. La coalición Oposición Democrática de Serbia (DOS) insiste en que puede probar que su candidato a la Presidencia, Vojislav Kostunica, obtuvo el 52'54 de los votos frente al 35'01 de Milosevic.