Las escandalosas revelaciones póstumas de un ex directivo del RPR podrían servir a tres jueces para reactivar las investigaciones sobre la pregunta financiación irregular del partido neogaullista del presidente de la República Francesa, Jacques Chirac. Con dos de esos magistrados al frente, la policía judicial llevó a cabo ayer un registro en la productora de documentales que ha custodiado durante cuatro años el original del polémico vídeo póstumo del promotor Jean-Claude Méry que implica al jefe del Estado francés en la presunta financiación irregular del partido neogaullista.
Se trata de los magistrados Eric Halphen, quien instruyó durante cinco años un sumario sobre presuntas irregularidades en el mercado de adjudicación de obras públicas en el Ayuntamiento de París, y de Marc Brisset-Foucault, quien junto a su colega Armand Riberolles se encarga de la investigación de la presunta manipulación de adjudicaciones en la región parisiense. El objetivo fundamental del registro fue la incautación de la cinta de vídeo, cuyo contenido íntegro ha sido divulgado por el vespertino «Le Monde» entre el jueves y ayer, además de interrogar al director de la productora «Sunset Presse», Arnaud Hamelin, y requisar otros materiales no especificados.
En ese polémico testamento, grabado en 1996, «por si me pasa algo», Méry afirmó que durante siete años (1985-1992) recaudó fondos millonarios para el Reagrupamiento por la República (RPR) y que durante ese tiempo trabajó «a las órdenes de Jacques Chirac». Incluso precisó que el ahora jefe del Estado fue testigo el 5 de octubre de 1986 de cómo él entregaba en mano 762.245 euros a Michel Roussin, entonces jefe del Gabinete municipal de Chirac.