La ONU cerró el lunes una fábrica contaminante en la región sensible de Kosovska Mitrovica (norte de Kosovo) tras la intervención al amanecer de la Fuerza multinacional de paz (KFOR), lo que provocó enfrentamientos entre obreros y militares.
Bernard Kouchner, jefe de la misión de la ONU en Kosovo y gobernador de facto de esa provincia, dijo que la planta de Zvecan fue cerrada temporalmente ayer lunes por la mañana por razones sanitarias, tras comprobarse que el nivel de contaminación del aire era 200 veces superior a lo permitido. «Cerramos esta fábrica por razones de salud pública. Debíamos hacerlo. Esta fábrica constituye un peligro para la población», declaró Kouchner en una rueda de prensa en Kosovska Mitrovica, a un kilómetro de Zvecan.
La región de Mitrovica, donde viven serbios y albaneses, es con frecuencia escenario de incidentes. A petición de la ONU, un contingente de 250 soldados franceses, británicos y daneses de la fuerza multinacional de la KFOR penetró en la fundición contaminante de Trepca para tomar control del sitio y garantizar la seguridad, declaró un portavoz de ese cuerpo armado. En un incidente diferente ocurrido poco después, una patrulla de soldados británicos fue atacada a pedradas por veinte serbios. Cuatro militares resultaron heridos.