El Ejército israelí presentó sus excusas por la muerte de una mujer palestina que falleció ayer por los disparos de los soldados israelíes en la banda de Gaza, y afirmó que se trata de un «trágico error». «Estamos desolados por esta pérdida de una vida humana y deseamos y pronto restablecimiento de los heridos», declaró el general Yair Naveh, comandante de las fuerzas israelíes en Gaza durante una rueda de prensa ofrecida cerca de la colonia israelí de Kfar Darom.
«Espero que este suceso no provoque una escalada de violencia»,
señaló.
Según una fuente hospitalaria palestina, la víctima, Attidal
Moamar, de 33 años, fue herida de un disparo en la cabeza a manos
de los soldados israelíes cuando se encontraba en el coche, en la
ruta que une a las ciudades de Gaza y Rafah. Su esposo Sharif y sus
dos hijos, de seis meses y seis años, que se encontraban en el
vehículo, también resultaron heridos de bala, así como el conductor
de un taxi que circulaba en sentido inverso. Uno de los niños se
encuentra en estado grave.