Decenas de millones de mexicanos acuden hoy a las urnas en una crucial e histórica elección, que podría poner fin a 71 años de gobierno ininterrumpido del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El candidato oficialista Francisco Labastida, economista de 57 años, quiere dar hoy un nuevo triunfo electoral al PRI, mientras el empresario conservador Vicente Fox, desea poner fin al récord de ese partido de 71 años gobernando México. Encuestas y analistas muestran que no hay más opciones y que los otros aspirantes, el izquierdista Cuahtémoc Cárdenas, el ex priísta Manuel Camacho y el socialdemócrata Gilberto Rincón, sólo pueden soñar con no quedar muy rezagados. El candidato del PRI está seguro de ganar, niega el fraude que teme la oposición y rechaza que el Gobierno actual, del presidente priísta Ernesto Zedillo, use los programas oficiales para favorecerle. Labastida, economista de 57 años, ex ministro y ex gobernador estatal, afirmó que él y el PRI tienen un compromiso con la democracia y la honestidad.
Consultado sobre los temores de disturbios después de los comicios, Labastida respondió que espera que todos los candidatos «aceptarán responsablemente los resultados. Labastida rechazó las denuncias de la oposición y de organismos no gubernamentales mexicanos y extranjeros sobre actos de coacción y compra de votos cometidos supuestamente por el PRI y que pueden empañar los comicios. Fox, candidato del PAN quiere como regalo la Presidencia y se declara triunfador por anticipado. Aunque admitió la posibilidad de una victoria del candidato oficialista, advirtió de que «sólo una ventaja clara permitirá a Labastida convencer a los mexicanos de su triunfo con legitimidad».