El destino del niño cubano Elián González puede ser decidido hoy en una reunión entre el Servicio de Inmigración y Naturalización (INS) y Lázaro González, tío abuelo del niño. En caso de que Lázaro González se niegue a firmar un documento por escrito donde se comprometa a entregar a Elián si pierde una apelación a un dictamen del juez federal Michael Moore, el INS revocará el permiso de estancia provisional del niño en Estados Unidos.
Se daría paso así a su inmediata repatriación a Cuba, aunque no se sabe cómo lo haría el INS, al declarar el tío abuelo que no lo entregará voluntariamente.
El alcalde de Miami, Joe Carollo, ya dijo que no cuenten con la policía de esta ciudad para que agentes federales saquen por la fuerza a Elián de la casa de Lázaro González. «La policía de Miami no va a participar en una acción para arrebatar al niño de la casa de sus familiares para enviarlo al infierno de Castro», dijo el alcalde. En su dictamen, el juez Moore dijo el pasado día 21 que es la secretaria de Justicia, Janet Reno, quien tiene competencia sobre este asunto de inmigración, y ésta ha reiterado que Elián debe regresar con su padre «lo antes posible, de una forma ordenada, justa y pronta».
Aunque ese departamento ha endurecido su posición ante los familiares en Miami de Elián, falta por ver si hay una decisión política para sacar por la fuerza al niño de esa casa, a sabiendas de que esa acción suscitaría fuertes protestas de los exiliados cubanos de esta ciudad. Algunos grupos de exiliados han amenazado con paralizar el aeropuerto y el puerto de Miami, además de formar una cadena humana alrededor de la manzana donde está la casa en la que vive Elián.