El Consejo Administrativo de Transición en Kosovo, encabezado por la misión de la ONU (UNMIK), ha decidió formar un «servicio profesional civil» que sería el germen de un futuro «gobierno» kosovar, según el informe de sesión. El servicio decidido por este Consejo, en el que hay representantes albaneses pero no serbios, sustituiría al propio Consejo Administrativo de Transición cuando abandone Kosovo la UNMIK, desplegada en junio pasado para administrar la provincia.
En el informe de la sesión, que tuvo lugar el viernes, no figura si el «gobierno» se formará antes o después de las elecciones. El «servicio civil» tendrá 19 carteras, pero el informe no precisa cómo serán repartidos entre representantes de los pueblos que viven en Kosovo, provincia de mayoría separatista albanesa. Pero mientras, la crisis de Kosovo, un año después de los bombardeos de la OTAN, parece que se está extendiendo a Montenegro y, lo más preocupante según los analistas, a Macedonia, el frágil corazón de los Balcanes.
La policía de la oficialmente llamada Antigua República Yugoslava de Macedonia (ARYM) ha extremado el control de sus fronteras con Kosovo y otras zonas de Serbia. Muchos comentaristas opinan que si Kosovo no se divide a pesar de que muchos consideran que ésa sería la solución más duradera y estable, es porque ello daría ejemplo a las fuerzas que quieren partir Macedonia en zona búlgara y albanesa.