El Estado argentino indemnizará al hijo de Noemí Gianetti de Molfino, asesinada en Madrid en 1980, en lo que constituye la primera reparación concedida a una víctima argentina del «Plan Cóndor» de cooperación en la represión aplicado por los regímenes militares suramericanos en la década de los 70.
Gustavo Molfino cobrará 224.000 pesos (algo más de 35 millones de pesetas), indemnización prevista por las leyes locales para víctimas de la represión política, informaron ayer fuentes oficiales a la prensa.
La indemnización fue aprobada por Inés Pérez Suárez, antes de concluir su gestión al frente de la Subsecretaría de Derechos Humanos como consecuencia del cambio de Gobierno argentino, a comienzos de mes.
Noemí Gianetti de Molfino, miembro del grupo Madres de Plaza de Mayo "familiares de desaparecidos a manos del último régimen militar argentino (1976-1983)", se había exiliado en Lima, donde fue secuestrada por paramilitares que la trajeron de regreso a Argentina.