EFE - BONN
La aparición de nuevos y comprometedores detalles de la red de financiación ilegal creada por expertos económicos de la Unión Cristianodemócrata (CDU) a instancias de Helmut Kohl presagian el final de la carrera del ex canciller, que ya ha sido invitado públicamente a abandonar su escaño de diputado.
Las palabras que muchos pensaban pero que nadie se atrevía a pronunciar salieron ayer, sábado, de los labios de la portavoz de Alianza 90/Verdes, socio minoritario en la coalición de gobierno. «Kohl debe renunciar a su condición de diputado», sentenció Gunda Roestel, para quien esa función no puede ser desempeñada por alguien que ha creado un entramado de cuentas secretas a sabiendas de que violaba la legislación vigente y que él, en tanto que canciller, tenía que ser el primero en respetar».
Las declaraciones de Roestel se producen 24 horas después de que la Fiscalía de Bonn recibiera dos denuncias por malversación de fondos contra Kohl, una del abogado de Hamburgo Matthias Waldraff y la otra de un militante de la CDU. La primera consecuencia de esas denuncias ha sido el cese fulminante del jefe de Administración de la CDU, Hans Terlinden, hombre de confianza del ex canciller. Portavoces de la CDU informaron que Terlinden fue apartado ayer de su cargo por decisión de Wolgang Schaeuble.