El primer ministro armenio, Vazguén Sarkisián, y el presidente del Parlamento, Karén Demirchán, murieron ayer en el asalto a tiros del Parlamento nacional, confirmó una nota oficial de la presidencia. La confirmación llegó después de seis horas de informaciones confusas sobre las víctimas del asalto a la cámara por parte de al menos tres pistoleros, en una acción calificada oficialmente como un «intento de golpe de Estado».
En la acción terrorista murieron al menos 10 personas, entre ellas dos vicepresidentes de la cámara, Yuri Bajshián y Rubén Miroyán, y el ministro de Asuntos Operativos, Leonard Petrosián. Más de 150 personas, el Ejecutivo en pleno, fueron tomadas como rehenes de los pistoleros, aunque entre 30 y 50 permanecían retenidas al cierre de esta edición. «Al primer ministro le dispararon a una distancia de unos dos metros y difícilmente habría podido salir con vida», manifestó una testigo.
Robert Kocharián, presidente de la república, dirige personalmente las conversaciones necesarias para tratar de conseguir la liberación de todos los rehenes. Los asaltantes, dirigidos por el ex periodista Nairí Unanián, relacionado con organizaciones ultranacionalistas, pidieron la convocatoria de elecciones, «cambios políticos» en el país, hablar en directo por televisión y un helicóptero.