Varios manifestantes enmascarados, contrarios al desfile de los protestantes, lanzaron «cócteles Molotov» y otros objetos contra la policía que trataba de disolverlos. Los residentes del área de Bogside, de mayoría nacionalista, habían organizado la protesta contra el paso del desfile por el barrio. La policía dispuso un amplio despliegue, que incluyó el levantamiento de barreras de acero para tratar de mantener separados a los dos bandos, mientras cerca de 10.000 miembros de la Orden desfilaban alrededor de las murallas de la ciudad.
El portavoz de la Asociación de Residentes de Bogside, Donncha MacNiallais, afirmó que «es una situación ridícula cuando no se permite a los nacionalistas, en un área que es 95 por ciento nacionalista, pasar por el centro de la ciudad, mientras que 10.000 lealistas que no viven aquí se aprovechan de ello». Horas antes, más de veinte personas, entre civiles y policías habían resultado heridas en los enfrentamientos entre manifestantes católicos y las fuerzas de seguridad por el desfile de la Orden protestante de los Aprendices en Belfast.
Una vez disuelta la manifestación, la marcha de la Orden de los Aprendices, una organización político-religiosa, transcurrió sin incidentes mayores, aunque los integrantes del desfile fueron abucheados. En otro desfile de los Aprendices celebrado en la localidad de Lurgan, en el sur del Ulster, también se registraron incidentes cuando unos 75 manifestantes lanzaron piedras y «cócteles Molotov» contra la policía.