El Ministerio de Sanidad belga autorizó ayer el retorno de la producción y venta de todos los productos de la gama Coca-Cola, con la condición de que la compañía cumpla cinco requisitos. Las dos empresas de Coca-Cola en Bélgica, situadas Wilrikj (cerca de Amberes) y Gante (norte de Bélgica), podrán volver a producir desde hoy la gama completa de los refrescos pertenecientes a la firma.
El ministro de Sanidad, Luc van den Bossche, señaló que la comercialización de esos productos será efectiva desde hoy. La semana pasada el Gobierno belga ya dio su visto bueno a la comercialización de las bebidas Nestea, Acuarius, Aqua Bon, Kinley, Lift y de los zumos de frutas Minute Maid, pero permanecieron prohibidos los refrescos de Coca-Cola, Fanta y Sprite.
Los cinco requisitos impuestos son la «utilización de nuevas materias primas; la limpieza profunda de las empresas e instalaciones concernidas por la reciente intoxicación; refuerzo de medidas de seguridad; puesta a punto de un sistema de vigilancia amplio y estadísticamente seguro de la fabricación de los productos y de las plantas, y recogida y destrucción de todos los productos cuya comercialización fue prohibida».
Los 28.000 distribuidores automáticos de Coca-Cola en los que se había detectado un olor raro seguirán estando por ahora fuera de servicio, dijo el ministro de Sanidad, Luc Van den Bossche, en conferencia de prensa.