El comandante en jefe de La Fuerza Aérea de Chile (FACH), general Fernando Rojas Vender, manifestó ayer el malestar de los militares por la detención en Londres del ex dictador Augusto Pinochet. «Estamos preocupados por el caso del general Pinochet», dijo Rojas Vender, quien el próximo viernes viajará a Gran Bretaña para visitar al ex presidente detenido hace casi ocho meses.
Las declaraciones del jefe aeronáutico coincidieron con la impaciencia que mostró el comandante en jefe del Ejército, general Ricardo Izurieta, al hablar el lunes en un acto militar. El discurso de Izurieta, que llevó al Gobierno del presidente Eduardo Frei a pedir «prudencia» a los jefes militares, coincidió con una orden de arresto a cinco oficiales retirados del Ejército, en un proceso por 72 fusilamientos sumarios que también afectan a Pinochet. «Estamos preocupados por todos estos procesos que se están reabriendo», señaló Rojas Vender, al referirse a esos oficiales que integraron la «Caravana de la Muerte».
El juez especial Juan Guzmán Tapia, que investiga en Chile una veintena de querellas contra Pinochet, sometió el martes a proceso a un general retirado y a otros cuatro ex oficiales que en 1973 participaron en la llamada «caravana de la muerte», que asesinó a decenas de presos políticos.