El acuerdo firmado anoche entre la OTAN y Yugoslavia establece una retirada por fases de las fuerzas serbias, de forma que la salida de las tropas podría verificarse incluso a partir de hoy. Yugoslavia tiene once días para retirarse de Kosovo y dentro de dos días debe entregar los planos sobre los campos minados y los depósitos de armas.
«Si los serbios actúan de buena fe, pueden demostrar que están realizando la retirada desde el primer día», aseguró el general Joseph Ralston, vicepresidente de la Junta de Jefes de Estado Mayor. Esto puede significar que los ataques podrían suspenderse hoy una vez que comience a llevarse a cabo la retirada, cuya duración total será de once días.
El comienzo «verificable» de la retirada permitirá a la OTAN decretar una pausa en los ataques, pero «si hay algún intento de sustraerse al acuerdo, los ataques se reanudarán», aseguró el secretario de Defensa, William Cohen.
La suspensión de los ataques permitirá que el Consejo General de la ONU apruebe una resolución, lo que abrirá la puerta al despliegue de una fuerza de paz dirigida por la OTAN. Cohen aseguró que las tropas de esa fuerza comenzarán a entrar en Kosovo «bastante rápido», una vez que empiece la retirada, para evitar así un «vacío» en la zona. «Estamos desplazando fuerzas para tenerlas preparadas», resaltó el jefe del Pentágono durante una conferencia de prensa.
El subsecretario de Defensa, Walter Slocombe, insistió en que el acuerdo «aún tiene que ser llevado a la práctica», y avisó de que la OTAN estará «vigilante» para asegurarse del cumplimiento serbio.
Los puntos claves del acuerdo incluyen: un alto el fuego inmediato, una retirada de todas las fuerzas militares, policiales o paramilitares serbias o Yugoslavas de Kosovo y ciertos compromisos sobre las defensas antiaéreas, así como identificación y limpieza de los campos de minas.
También se establece y autoriza el despliegue en Kosovo de una fuerza internacional (KFOR). El acuerdo divide a Kosovo en tres zonas: La número 3, situada al norte de la provincia, la dos, en el centro, y la uno, en el sur.
El comienzo de la retirada deberá hacerse en la zona tres dentro del primer día a partir de hoy, lo que permitirá demostrar la buena voluntad serbia y abrirá la puerta al final de los ataques, explicó Ralston.