El presidente del Gobierno, José María Aznar, aseguró ayer, al término de la visita que ha realizado en el campo de refugiados español en Albania, que aprecia una posibilidad de salida diplomática al conflicto tras el anuncio de Slovodan Milosevic de llegar a un acuerdo sobre el Plan del G-8.
Aznar aseguró que espera que así sea, y que se cumplan las condiciones establecidas de manera que pueda producirse la retirada de las tropas serbias de Kosovo, así como el despliegue de una fuerza internacional, y pueda ponerse en marcha un acuerdo de estabilidad en los Balcanes que permita arreglar la situación cuanto antes.
No obstante, al ser preguntado si confiaba en el acuerdo diplomático, Aznar dijo que tiene ese deseo y que los españoles han trabajado mucho desde distintos ámbitos y frentes, y espera que pueda ser así, pero añadió que hay que ser cauteloso porque siempre se dice «que el diablo está en los detalles, y tratándose de Milosevic los incumplimientos están en la memoria de todos». Aznar añadió que hay que ser «extremadamente cauteloso».
El presidente del Gobierno se entrevistó ayer con el presidente de la República de Albania, Resuep Mejdani, y el primer ministro, Pandeli Majko, y posteriomente viajó hasta el campo de refugiados. Aznar calificó las conversaciones que mantuvo con ambos mandatarios de «muy interesantes», e indicó que van a impulsar de manera muy decidida la cooperación bilateral entre España y Albania.