La OTAN espera que las autoridades yugoslavas den «pasos concretos» que demuestren su aceptación de «los términos y las condiciones» impuestas por la comunidad internacional para la pacificación de Kosovo. Según declaró ayer el portavoz adjunto de la Alianza, Peter Daniel, los Aliados «darán, por supuesto, la bienvenida» a cualquier «paso concreto» de Belgrado en pos de la aceptación de las exigencias internacionales.
La OTAN espera, no obstante, «información más detallada sobre la sustancia» de la reciente visita a Belgrado del enviado especial ruso para los Balcanes, Víctor Chernomirdin.
Tras la visita, celebrada el viernes, el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, anunció que aceptaba los «principios generales» del plan de paz diseñado por el G-8 (Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia, Canadá y Japón).
Pero el portavoz aliado indicó que la OTAN no ha recibido todavía ninguna información oficial sobre los resultados de esa reunión. «Los comandantes de Milosevic y las tropas a sus órdenes deben comprender que no habrá respiro hasta que Yugoslavia acepte las exigencias, no negociables, de la comunidad internacional», reiteró ayer el portavoz adjunto.
Daniel volvió a enumerar las condiciones para dejar claro lo que esperan los aliados: «Milosevic debe parar las matanzas, retirar todas sus fuerzas, aceptar una presencia militar internacional con la OTAN en su núcleo, permitir el regreso incondicional de todos los refugiados, y trabajar por una solución política permanente para Kosovo».
La Alianza intensifica sus bombardeos
La OTAN intensificó la madrugada del sábado sus bombardeos sobre
Yugoslavia en otra jornada de ataques que calificó como un
«considerable éxito», después de que Belgrado anunciara su
intención de aceptar «los principios generales» del plan de paz
occidental. En las últimas 24 horas -día 66 de la operación militar
Fuerza Aliada- los aviones de la OTAN efectuaron 639 salidas, de
las que 218 fueron de ataque a objetivos tácticos en Kosovo y
estratégicos en Serbia.