El socialdemócrata Johannes Rau podría ser elegido presidente de la República Federal de Alemania en la primera vuelta de las elecciones que se celebra hoy en Berlín, gracias a las deserciones registradas en las filas del Partido Liberal (FDP) que fueron anunciadas ayer por responsables de esta formación de oposición.
Sólo faltan nueve votos a la coalición gubernamental, socialdemócrata (SPD) y ecologista, en el seno de la Asamblea Federal para obtener la mayoría absoluta requerida en la primera y segunda vuelta del escrutinio. La mayoría relativa es suficiente para la tercera vuelta, por lo cual Rau tiene la victoria asegurada de todas formas.
Se trata de la décima elección de un jefe de Estado por la Asamblea Federal desde la fundación de la RFA en 1949, que en esta ocasión coincidirá exactamente con el 50 aniversario de la Constitución alemana. Caso de resultar elegido, Johannes Rau, 68 años, será el primer presidente socialdemócrata de la RFA de estos últimos 25 años y el segundo de su historia. En el plano personal, conocería finalmente la consagración que la vida política federal le había negado hasta la fecha.
En 1987, Johannes Rau perdió contra el canciller Helmut Kohl, acusando a su partido de haberle abandonado, una herida que tardó en cicatrizar. Pero en 1994, Rau sufrió otra derrota, previsible esta vez, ante el democristiano Roman Herzog, el presidente saliente al que sucederá. El presidente alemán es elegido para un mandato de cinco años, renovable una sola vez, por la Asamblea Federal (Bundesversammlung) que sólo se reúne en esta ocasión.
Integran esta asamblea la totalidad de los diputados alemanes, 669 en esta legislatura, y un mismo número de representantes de los 16 Estados regionales.