El primer ministro laborista Wim Kok, presentó ayer en La Haya a la Reina Beatriz de Holanda la dimisión colectiva de todos los ministros y secretarios de Estado del Gobierno de coalición después de una crisis interna por un proyecto de ley para introducir el referéndum.
El segundo Gobierno de coalición que preside Kok ha sido el más breve en la historia de Holanda. La coalición, que gobierna desde 1994, y formada por el PvdA (laborista), el VVD (Liberal de derechas) y el D66 (Liberal de izquierdas) fue reelegida hace sólo un año. La dimisión fue anunciada después de una sesión urgente del gabinete en pleno, convocada para discutir la crisis causada por su fracasada iniciativa de hacer aprobar la Ley de Referéndum. Kok no pudo convencer a los ministros del D66 de permanecer en el Gobierno durante una reunión al final de la cual Kok envió el mensaje a la Reina. La crisis se produjo por el conflicto causado por la oposición al proyecto gubernamental de incluir en el ordenamiento constitucional holandés la figura del referéndum, inexistente hasta ahora en este país.
Los partidos del Gobierno consiguieron hacer aprobar en el Senado una propuesta de reforma constitucional para introducir el llamado «referéndum correctivo», una figura con la que se podrían revocar decisiones tomadas por el Parlamento.