Las explicaciones del Pentágono y la CIA no han satisfecho a las autoridades chinas sobre el bombardeo de la embajada en Belgrado, mientras la diplomacia chino estadounidense se enfrenta a uno de sus momentos más difíciles. Estados Unidos ha intensificado sus esfuerzos diplomáticos para evitar que el incidente con China pudiera suponer un freno al proceso de búsqueda de una solución final al conflicto de Kosovo.
Según el diario The New York Times, que cita fuentes del Gobierno de EE UU, la OTAN estaría dispuesta a garantizar a China un pasillo aéreo en Yugoslavia para que un avión pueda evacuar a los integrantes de la embajada que deseen abandonar el país.
Las explicaciones dadas por la OTAN sobre lo ocurrido en Belgrado, que se basan en los informes del Pentágono y de la CIA, no han satisfecho a las autoridades de China, que realizan su propia investigación sobre lo sucedido, según el embajador chino en Washington, Li Zhaoxing.
Desde Washington, el Departamento de Defensa y la CIA han explicado que el error se debió a un fallo en la información de los servicios secretos que suministraron a los pilotos, al confundir la ubicación del objetivo seleccionado, un Centro de compras de armamento, con la de la embajada.
En un comunicado conjunto, la CIA y el Pentágono reconocen que las comprobaciones previas a la acción que se realizan no lograron subsanar el error, que concluyó con el bombardeo de la legación china, en la que murieron tres personas y otras 20 resultaron heridas.