Las conversaciones entre los partidos norirlandeses para dar un nuevo impulso al proceso de paz quedaron el jueves interrumpidas hasta el 13 de abril tras alcanzar las «bases para un acuerdo».
Según los primeros ministros británico, Tony Blair, e irlandés, Bertie Ahern, las bases prevén la celebración de un «acto colectivo de reconciliación» en el que se inutilizarán armas terroristas.
Este acto se celebrará antes de un mes después de que la ministra británica para Irlanda del Norte, Mo Mowlam, haya iniciado el proceso para la formación de un gobierno autónomo y estará supervisado por la comisión internacional para el desarme terrorista.
Los partidos deberán acordar los nombres de las personas que se convertirán en ministros del ejecutivo autónomo. El Gobierno británico corresponderá de modo recíproco, con medidas para la «desmilitarización y la normalización en reconocimiento de la situación que estamos a punto de conseguir», afirmó Blair.
Según Blair, los partidos norirlandeses están de acuerdo en tres cosas: que la violencia debe abandonarse, que ello debe llevarse a cabo según el calendario que establece el acuerdo de paz y que deben crearse las instituciones democráticas que fija ese documento.