Un hombre, al parecer un destacado dirigente paramilitar protestante, fue asesinado ayer en un aparcamiento del barrio de Shankill Road, en Belfast Oeste. La víctima, de unos 40 años, según la Policía norirlandesa, era uno de los dirigentes del grupo paramilitar «Comando de la Mano Roja», que mantiene un alto el fuego desde el 13 de octubre de 1994. Según testigos presenciales, tres hombres abrieron fuego cinco veces contra la víctima y escaparon a pie del lugar de la escena.
La Policía norirlandesa ha acordonado el área alrededor del lugar del incidente mientras expertos forenses lo examinan. La víctima, que había cumplido una serie de sentencias por delitos de terrorismo, fue puesto en libertad en la cárcel de Magilligan, en el centro del Ulster, el pasado lunes, tras cumplir una sentencia leve.
La organización terrorista protestante «Defensores de la Mano Roja» se atribuyó el asesinato el pasado lunes de la abogada nacionalista Rosemary Nelson en Lurgan, en el sur del Ulster, que murió al estallar una bomba colocada bajo su automóvil. Una de las hipótesis con las que trabaja la Policía británica es que el asesinato de ayer se produce como represalia por la muerte de la abogada, que se destacó en la defensa de los católicos norirlandeses.