El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, descartó ayer que su país vaya a reconciliarse con Estados Unidos, mientras Washington mantenga una postura contraria al Islam, informó la agencia oficial de noticias iraní, IRNA.
Al dirigirse a los fieles musulmanes en el sermón del viernes en la Universidad de Teherán, la principal tribuna política del país, Jamenei dijo que «Irán no es enemigo del pueblo estadounidense, pero no cree en su Gobierno».
«El Gobierno estadounidense quiere ser el único que mande en el mundo entero», apuntó Jamenei, que afirmó que Washington «está equivocado, si cree que el pueblo iraní va a dar la espalda a la Revolución islámica» -que derrocó al sha Mohamed Reza Palevi en 1979- y va a permitir la dominación de EE UU.
Para Jamenei, «nuestro problema con EE UU no es la restauración de las relaciones diplomáticas, sino que su Gobierno quiere dictar la política de otros estados, sobre todo los más débiles».
«Lo que pretende (Estados Unidos) es ostentar la hegemonía, no tener relaciones. (EE UU) Quiere volver a tener los privilegios políticos, económicos y militares de que disfrutaron durante treinta años con el anterior régimen (del sha)», recalcó.
«Estados Unidos quiere actuar como un déspota ... En cuanto ocurra un problema en Afganistán, el Golfo Pérsico, Oriente Medio o Europa, Estados Unidos tiene que intervenir. ¿Por qué?», se preguntó.