El ex secretario general de la OTAN y ex ministro belga de Economía Willy Claes fue condenado ayer a tres años de prisión por corrupción pasiva, la pena más dura en el juicio «Agusta-Dassault», uno de los mayores escándalos político-financieros de la historia de Bélgica. El Tribunal de Casación belga dictó ayer la sentencia, con penas para doce inculpados que oscilaron entre tres años y tres meses de prisión, con sentencias en suspenso durante un periodo de cinco años.
Sin embargo, las sentencias significaron políticamente un gran golpe para las dos ramas del Partido Socialista de Bélgica, la flamenca (SP) y la valona (PS), que podría tener además una negativa repercusión en las elecciones legislativas de junio de 1999.
El escándalo por las comisiones ilegales de las firmas aeronáuticas italiana «Agusta» y la francesa «Dassault» como contrapartida para obtener la adjudicación de contratos militares del Estado belga llevó al banquillo de los acusados a dos ex ministros socialistas, al ex presidente del PS y a otras nueve personas relacionadas con este caso.
Willy Claes, en la época ministro de Economía belga, conocía perfectamente el pacto corruptor y mintió a la justicia, consideró el tribunal en la lectura de una maratoniana sentencia. «Hubo una relación directa entre la oferta de donaciones y la obtención del contrato Dassault», se indicó asimismo en la sentencia, dictada por quince magistrados.